La capital ecuatoriana, Quito, ha estado en constante evolución en términos de infraestructura y desarrollo urbano. Uno de los proyectos más ambiciosos y esperados ha sido el Metro de Quito. Sin embargo, la gestión de este monumental proyecto ha tenido sus altibajos, especialmente en términos financieros y operativos.
Deudas y Pagos: El Panorama Actual
La Alcaldía de Quito, bajo la gestión de Pabel Muñoz, se ha enfrentado a dilemas en relación con los pagos al operador del metro. Según el acuerdo firmado en noviembre de 2022, la Alcaldía tenía el compromiso de desembolsar $2,5 millones mensualmente durante un plazo de 72 meses. No obstante, estos pagos se encuentran en pausa, esperando la reactivación del sistema de transporte, que, según las previsiones, retomaría sus operaciones en diciembre de 2023.
Mientras tanto, la Empresa Metro de Quito se halla en una fase crítica, afinando detalles operativos y administrativos para que el metro pueda funcionar sin inconvenientes. Entre estos detalles se encuentra la definición del sistema de cobro y la realización de pruebas técnicas.
La «Tarjeta de la Ciudad»: Una Propuesta Innovadora
Una de las soluciones más prometedoras y modernas presentadas por la Alcaldía ha sido la «tarjeta de la ciudad«. El 23 de agosto de 2023, el alcalde Muñoz mostró al público el primer modelo de esta tarjeta que incorpora un chip de aproximación. Esta tarjeta, respaldada por una entidad financiera, ofrece la posibilidad de integración con sistemas globales como Visa.
El principal objetivo detrás de esta tarjeta es facilitar la movilidad en el transporte público de la ciudad. Con una meta de un millón de tarjetas en circulación, se espera que sea el medio principal para acceder al Metro, Trolebús, Ecovía, y buses privados dentro del sistema integrado.
Además, se presenta como una solución social, ya que se planea distribuir la tarjeta a personas en situación de extrema pobreza, permitiéndoles recargarla con montos predefinidos para su uso en el sistema de transporte.
Renegociación en Curso: ¿Qué Esperar?
Septiembre traerá consigo nuevos aires en cuanto a las negociaciones entre el Municipio de Quito y el operador internacional del Metro. Recordemos que según el contrato estipulado en 2022, el Cabildo tenía la responsabilidad de abonar más de USD 2,5 millones mensuales al consorcio internacional. Sin embargo, esta obligación no se ha cumplido desde enero debido a la renegociación en curso.
El alcalde Muñoz ha sido claro al respecto: si no se recibe un servicio, no se debe pagar por él. Esta postura resalta la necesidad de seriedad y compromiso en las obligaciones contractuales.
Paralelamente, Víctor Hugo Villacrés, gerente del Metro de Quito, informó sobre el avance en la elaboración del inventario de los 37 000 componentes que componen la obra. Este proceso es fundamental para la contratación del servicio de mantenimiento.
Aunque se espera que en octubre el Municipio reciba la obra de la empresa constructora, existen probabilidades de retrasos. Sin embargo, la promesa firme es que el Metro de Quito iniciará su operación comercial en la primera semana de diciembre.
Quito se encuentra en una encrucijada importante respecto al futuro de su Metro. Entre renegociaciones, innovaciones y expectativas, la ciudadanía aguarda con ansias el momento en que este ambicioso proyecto sea una realidad operativa y eficiente, que mejore y modernice la movilidad en la capital ecuatoriana. Solo el tiempo determinará si las promesas y compromisos se cumplen en beneficio de todos los quiteños.